Desde mi vivencia personal con el TCA y todo mi proceso de recuperación, tengo el convencimiento de que es un camino que merece la pena transitar acompañada y creo profundamente que la unión hace la fuerza.
El objetivo de los encuentros grupales es poder ofrecer un espacio seguro, de confianza y sin juicios a todas las personas que participan. Un espacio enfocado al practicar la meditación, compartir preocupaciones, dificultades y experiencias, crear vínculos, cultivar el autoconocimiento, trabajar las relaciones interpersonales y las emociones, sentirse comprendidas y, sobre todo, ver que no están solas.
Lo más importante para mí en estos encuentros es que todos puedan encontrar un espacio donde sentirse sostenidas y ver que también tienen la capacidad de ayudar y que tienen muchas cosas que aportar a sus compañeras.
Los grupos están formados por personas de una franja de edad similar con el objetivo de poder también seguir construyendo la relación fuera del espacio de terapia grupal, pedirse ayuda en momentos de necesidad, realizar encuentros y salidas de ocio .